Es díficil
no tener a este hombre en muy alta estima. Sin sus teclados los Doors hubieran
sido una muy buena banda y no una banda con un sonido completamente distinto. Fue
uno de los pocos de su generación en abandonar los Cadillacs descapotables y
meterse en los antros de Los Angeles a escuchar (y tratar de entender) el punk
rock, produciendo, entre otros, el fundamental disco debut de X. Mientras los
otros dos miembros sobrevivientes “bajaban a tierra” con la Butts Band (Krieger y Densmore), él fue el
que siguió cargando la antorcha con el que vamos a escuchar esta semana, su
disco debut como solista, The Golden Scarab, en el ’73.
¿Qué vamos a escuchar? Algo así como la continuación natural de lo abandonado por los Doors después de Waiting for the Sun, una mezcla de ritmos latinos, psicodelia, funk y letras literarias de alto vuelo (el tema que da título está basado en un cuento de Edgar Allan Poe). Manzarek escribe todas las canciones, canta (en un estilo muy Morrison) y hasta se dá el gusto de deformar completamente “Downbound Train” de Chuck Berry. Para seguir en la línea Doors cuenta con Jerry Scheff en bajo y con el gran Bruce Botnick en la producción.
Lo vamos a escuchar este miércoles y el sábado, cuando den las seis de la tarde, como suele ser.
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